Tango India

El inicio fue difícil, muy difícil. Subir el equipo a un carro, armarlo en el escenario, desarmarlo y volverlo a montar en el vehículo no les dejaba disfrutar a plenitud de su música ni de su público. Su sueño musical parecía inalcanzable. Pero los resultados de su trabajo fueron cada día más satisfactorios. Con el pasar de los años el grupo Tango India ha ido madurando y consolidándose en el ámbito nacional. Hoy ese esfuerzo se ve recompensado con una producción que esperan llevar por Centroamérica, Venezuela, Colombia, el mercado latino norteamericano y más allá del Atlántico. Alzando vuelo Los inicios de Tango India (que significa "Costa Rica" en el código aeronáutico) se remontan a la adolescencia de dos de sus integrantes, Felipe Solís y Juan Diego Villegas. Con tan solo 17 años, ellos comenzaron a construir un sueño y proyectar su música. La faena no ha sido fácil, pero en 1998 completaron su disco ¿Dónde estás si no es aquí?, el primer paso en la realización de sus proyectos. A mediados de 1999 mejoraron considerablemente el espectáculo en vivo y se incorporaron tres integrantes: Gabriel Wiernik, Alonso Carballo y Marco Castro. Al mismo tiempo, tocaron las puertas de las radioemisoras costarricenses y el resultado fue positivo: Azul y Esperaré fueron los temas que ayudaron al grupo a alzar vuelo, a tal punto que la segunda fue incluida en radioemisoras que no programan canciones de este corte. La calidad y originalidad eran innegables. Para el mundo Tango India había cumplido su primera etapa y ahora necesitaba el apoyo de una casa disquera para llevar ¿Dónde estás si no es aquí? a un mercado más amplio. La mejor oportunidad le llegó con la firma Líderes, la cual tiene contactos con Sony Music. Para Líderes, "Tango India tiene con qué pegar en cualquier mercado porque es gente muy buena, lo mismo que su música. Creemos en lo que se está haciendo por su potencial como músicos." Ahora la idea es muy simple: seguir creciendo en Costa Rica y expandirse por todo el mercado centroamericano, así como el venezolano y el colombiano. Es un gran reto, pero el grupo está seguro de triunfar también en el exterior. Para ello, el plan de promoción es muy fuerte. La casa disquera envió paquetes con su información a todos los periódicos y emisoras de Centroamérica. Es una inversión considerable, pero confían en obtener buenos resultados. "Apostamos a ganar" A partir de ahora, la imagen que quieren proyectar es la de un grupo profesional que va directo al triunfo. De hecho, ya los discos están en manos de los promotores centroamericanos, en espera de ser llevados a las radioemisoras. Aunque saben que el proceso de "calentamiento" de un disco es muy laborioso, eso no les impide prever que la respuesta del público será positiva. "Pero no solo deseamos una primera impresión positiva, sino que necesitamos llegar arriba y quedarnos ahí." Primero desean conquistar a los medios, ya que están convencidos de que son ellos los motores del mercado musical. En Venezuela y Colombia esperan promocionarse a inicios del próximo año, pues en diciembre se produce una especie de letargo musical, que no les beneficiaría en nada si adelantaran sus planes. "Es mejor ser pacientes y esperar la mejor oportunidad, cuando le podamos llegar mejor al público". Y es precisamente ese optimismo y seguridad, al que Felipe llama "buena vibra", el que siempre ha guiado el vuelo de esta agrupación. Sin duda, la buena vibra, junto con el planeamiento y el trabajo, produce más frutos cada día. Por ejemplo, ya se encuentran en busca de un productor europeo que los asesore en su próximo disco. Esa persona también les ayudará en la realización de una especie de vídeo biográfico, el cual les servirá para presentarse en el lugar donde actúen. El vuelo de Tango India se enrumba hacia buena parte de América Latina, con el fin de llegar a más público y cumplir todos los sueños por los cuales comenzaron a luchar. Es ahora cuando observan los mayores frutos de su empeño, pero están convencidos de que esto no es sino un sinónimo de que más trabajo les espera para poder llegar cada día más lejos, cada día más alto.